La Oficina Verde de la Universidad de Burgos organiza la Conferencia Ambiental OnLine: “Contaminación del Suelo”. Juana Isabel López Fernández (UBU). El jueves 13 de mayo a las 19:00h.
Juana Isabel López Fernández Doctora en Ciencias Químicas, profesora en el Área de Edafología y Química Agrícola y miembro del Grupo de Investigación en Compostaje, UBUCOMP de la Universidad de Burgos. Ha participado en diversos proyectos de investigación relacionados con los riesgos ambientales y la utilización de materiales orgánicos residuales en agricultura y en la recuperación de espacios degradados.
Nos acercará a un tema tan interesante como es la contaminación del suelo. Esta contaminación, supone la acumulación de sustancias tóxicas en una concentración que supera el poder de amortiguación natural del suelo y que modifica negativamente sus propiedades. Con frecuencia no puede ser directamente evaluada o percibida visualmente, convirtiéndola en un peligro oculto.
La evaluación de la contaminación se entiende como el riesgo que supone para la salud pública y el medio ambiente, de manera que el grado de contaminación de un suelo no puede ser dado solo por los valores totales de contaminante frente a unos valores guía, sino que es necesario considerar la biodisponibilidad del contaminante y su posible asimilación por los organismos del suelo.
La preocupación por la degradación y conservación de suelos por parte de organismos internacionales, se remonta a unos 50 años atrás. La Carta Europea de los Suelos (Consejo de Europa, 1972) ya apuntaba la preocupación por la degradación y contaminación del suelo debido a actividades antrópicas. Posteriormente, La Carta Mundial de los Suelos (FAO, 1981) tiene como objetivo aunar esfuerzos para definir los principios de actuación para la explotación de suelos de forma sostenible y las directrices para la formulación de políticas nacionales. Poco a poco se va reconociendo la importancia de los suelos. Sin embargo, la legislación Europea y Española han carecido de instrumentos normativos para promover su protección y hasta la promulgación de la Ley de Residuos de 1998 en España no se disponía de ninguna Norma Legal que permitiera proteger eficazmente los suelos contra la contaminación, y en el caso de los ya contaminados identificarlos y caracterizarlos utilizando una metodología normalizada y técnicamente rigurosa. El Real Decreto de 2005 establece la relación de actividades potencialmente contaminantes del suelo y los criterios y estándares para la declaración de suelo contaminado.
El Informe Mundial sobre Recursos del Suelo (SWSR) ha considerado la contaminación del suelo como una de las principales amenazas que sufren los suelos del mundo y los servicios ecosistémicos que nos proporcionan.
Las principales fuentes de contaminación del suelo son de origen antropogénico como consecuencia de actividades humanas exógenas que aportan sustancias producidas en actividades industriales, residuos sólidos urbanos, residuos ganaderos, agroquímicos y derivados del petróleo principalmente, que llegan al suelo bien de manera accidental, por ejemplo, derrames de cisternas que transportan hidrocarburos o infiltraciones de balsas que contienen aguas residuales, o de manera intencionada como el aporte de fitosanitarios en la agricultura. No debemos olvidar los llamados contaminantes emergentes, contaminantes que aparecen en la vida cotidiana y que pueden alterar la calidad del medio ambiente, tales como los productos farmacéuticos, hormonas, antibióticos y toxinas, entre otros.
Otra fuente de contaminación son los microcontaminantes biológicos que se encuentran en el suelo y que incluyen bacterias y virus.
La contaminación del suelo también puede tener un origen natural de forma endógena, durante los procesos de edafización, es decir en la formación del suelo se liberan elementos químicos contenidos en las rocas que se concentran en el suelo alcanzando niveles tóxicos.
La presencia de contaminantes en el suelo conlleva a la degradación del mismo rompiendo su equilibrio físico, químico y biológico, reduciéndose la capacidad para llevar a cabo sus funciones, como la regulación del clima, la purificación del agua, el ciclo de nutrientes, el hábitat para organismos, la retención de carbono, la producción de alimentos sanos y de buena calidad, entre otras.
Podemos decir, que aunque el suelo ha sido durante mucho tiempo el gran olvidado, dependemos de él para nuestras actividades diarias y para el futuro de nuestro planeta, siendo fundamental mantenerlo sano, pues solo así podremos cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados para el 2030.
Es por tanto esencial desarrollar métodos de recuperación y rehabilitación de suelos contaminados que sean limpios como la biodegradación o la fitodegradación, dejando a un lado métodos más agresivos y costosos como la rehabilitación física.
- Fecha: 13 de mayo
- Hora: 19:00 h
- Para acceder a la conferencia en el siguiente enlace
Esta actividad se ajustará en todo momento al protocolo del Covid-19, siendo obligatorio el uso de mascarilla por todos los asistentes y asegurándose de cumplir con la normativa de distancia mínima (1,5 m). Se recomienda llevar gel hidro-alcohólico personal.
Si eres estudiante de Grado en la UBU, participar en esta Actividad te da derecho a que se reconozcan créditos (0,1). Para que el Responsable de UBUverde realice el informe correspondiente es necesario que el alumno lo manifieste ante el monitor de la actividad y presente la tarjeta de reconocimiento de créditos previamente solicitada a UBUVerde siguiendo las intrucciones del siguiente enlace.
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Esta actividad está relacionada con los siguientes Objetivos de Desarrollo Sostenible #ODS