Setenta investigadores de primera línea de todo el mundo, coordinados por el danés Morgens Jacobsen, miembros del proyecto europeo Pathogen Combat, participarán la próxima semana en un encuentro científico organizado por las universidades de Burgos y Stutgartt con el propósito de analizar la seguridad alimentaria en productos cárnicos y lácteos.
El vicerrector de Investigación de la Universidad de Burgos, Jordi Rovira, recuerda que la Universidad de Burgos será la anfitriona de un encuentro que celebran las universidades y centros de investigación que participan en este proyecto europeo con la finalidad de transferir los resultados y aplicaciones de las investigaciones en materia alimentaría de 44 socios, de 17 países. De España, en este proyecto hay cuatro empresas y la Universidad de Burgos, entre ellas, el Instituto Tomás Pascual, Alimentaria (Investigación Tecnología y Seguridad y Group European Hybienic Engineering&Design (EHEDG) que han unido sus esfuerzos con el objetivo de tratar de reducir la presencia de patógenos alimentarios en Europa, mediante un enfoque holístico y multidisciplinario en la prevención y control de nuevos patógenos emergentes en los alimentos.
Tras la reunión anual, el consorcio ha organizo el 18 de junio, en el Aula Magna del Hospital del Rey, un taller que lleva por título ¿Cómo puedo aumentar la seguridad alimentaria de mis productos?, destinado a difundir los resultados de las investigaciones que se están realizando.
Este evento se enmarca dentro del proyecto t-CUE de Transferencia del Conocimiento Universidad-Empresa, incluido en la Estrategia Regional de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación de Castilla y León 2007-2013, cofinanciado por fondos FEDER a través de la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León. Al encuentro asistirán representantes de todo tipo de industrias transformadoras, desde mataderos, carnicerías e incluso restaurantes, que desean ampliar sus conocimientos en materia de seguridad alimentaria. En la Jornada también participará el Centro de Investigación AINIA de Valencia, que pertenece la Grupo Europeo de Diseño Higiénico de Equipamiento (EHDEG) para aumentar la seguridad alimentaria en equipos destinados a la elaboración de alimentos.
Además del coordinador Morgens Jacobsen destaca la participación en este meeting del australiano Sven Rasmussen, del Australian Food Safety Centre of Excellence (AFSCoE); y de los microbiólogos Larry Beuchat y Wilhelm Holzapfel. El consorcio internacional trabaja en el desarrollo nuevos métodos analíticos, que permitirán analizar y detectar los patógenos en los alimentos; y en nuevas técnicas para reducir el número de patógenos, sistemas de limpieza y desinfección que puedan reducir la contaminación cruzada entre la superficie y los alimentos.
En concreto, el equipo del área de Tecnología de los Alimentos de la Universidad de de Burgos trabaja en este proyecto con técnicas de DNA mediante PCR, que es un instrumento para detectar patógenos alimentarios. El vicerrector de Investigación, Jordi Rovira, afirma "utilizamos una técnica muy interesantes para detectar patógenos alimentarios y ver qué tipo de bacterias están en los alimentos y también trabajamos en la contaminación de superficies para ver cómo las bacterias se pegan a dichas superficies y a los alimentos que entran en contacto con ellas".
Este programa europeo, asimismo, incluye, un estudio de determinados virus que se pueden transmitir vía alimentaria como la hepatitis E y otros endémicos del centro de Europa.