El alumnado del último curso de Bachillerato del IES Diego Porcelos defendió el pasado día 25 en el Aula de Romeros de la Facultad de Derecho la Universidad de Burgos sus proyectos del Bachillerato de investigación/excelencia del curso 2024/2025.
En la presentación del acto, la vicerrectora de Estudiantes de la UBU, Sara Gutiérrez, alabó el valor de los participantes por haber optado por el Bachillerato de Investigación/Excelencia, recordándoles que el desarrollo de nuevas habilidades y competencias les será de utilidad en el futuro, y que la Universidad de Burgos tiene sus puertas abiertas para ellos.
Javier Seara, de la Dirección Provincial de Educación de Burgos, felicitó a los estudiantes por concluir este proceso de aprendizaje y elogió su “excelente trabajo”, mientras que el director del IES Diego Porcelos, Jesús Martín Gómez, señaló que este es el primer curso en el que el centro cuenta con alumnado en 2º curso del BIE y también resaltó la trascendencia del tema central abordado en los proyectos, la salud mental, que resulta de gran preocupación en la actualidad.
Lucía Asensio Basurto, Lucía Asensio Rodríguez, Irene García González y Lydia Hernando Castilla fueron los responsables de presentar el primer proyecto, “Salud mental y trastornos de la conducta alimentaria. Explorando vínculos entre conductas de riesgo y el bienestar emocional”, en el que, tras destacar la falta de información sobre diversas enfermedades relacionadas con la salud mental, como los trastornos de la conducta alimentaria (TCA), presentaron una investigación cuasiexperimental que analiza los efectos de una intervención educativa mediante charlas informativas sobre ellos. Tras analizar un número considerablemente elevado de cuestionarios realizados a grupos de estudiantes antes y después de las sesiones, concluyeron que este tipo de intervenciones no solo incrementa el conocimiento sobre la salud mental y los TCA sino que también contribuye a desmitificar creencias erróneas y a reducir actitudes negativas hacia quienes los padecen.
Por último, en el proyecto “Sexualidad y salud mental. Explorando vínculos entre conductas de riesgo y el bienestar emocional”, Héctor Beneite Arnaiz, Nora Fernández Ferrero, Gadea Rojo Bernal y Alejandro Sanz Gonzalo presentaron los resultados de un estudio que muestra cómo una mejor y mayor información sexual en etapas tempranas puede influir en una adecuada toma de decisiones, promover el respeto a la diversidad y fomentar una educación más inclusiva. Pare ello llevaron a cabo una intervención educativa con estudiantes de ESO, utilizando como grupo de control estudiantes universitarios. Realizaron una serie de cuestionarios antes y después de la intervención y su posterior análisis puso de manifiesto que el consumo de pornografía, la presión grupal o los problemas de autoestima en ciertos casos y la falta de información adecuada son factores que afectan la percepción de las relaciones interpersonales, promoviendo la adopción de conductas poco saludables, tanto físicas como mentales. Los resultados demostraron que las charlas de sensibilización tienen un impacto positivo en la reducción de prejuicios, el fortalecimiento de actitudes saludables y la prevención de conductas de riesgo, por lo que concluyeron proponiendo implementar este tipo charlas en diversas etapas educativas adaptadas a la edad de los estudiantes y con el fin de contribuir a una comprensión más amplia y saludable de la sexualidad.