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El Rector de la Universidad de Burgos, Alfonso Murillo Villar, y el Director Gerente del Instituto Tecnológico de Castilla y León, José María Vela Castresana, han suscrito un convenio de colaboración con el objeto de constituir formalmente un grupo de trabajo de investigación entre el Laboratorio de Autonomía Avanzada de la UBU y el ITCL con la idea de buscar soluciones tecnológicas para el mundo de la discapacidad y medicina, y otras variables.
En virtud de este acuerdo se creará una empresa tecnológica que comercializará los productos desarrollados por ambos, dispositivos médicos y biomédicos que hagan "más fácil" la vida a personas que tienen limitaciones porque sufren alguna discapacidad, como las secuelas de un ictus cerebral o la pérdida de fuerza y potencia muscular asociada a la vejez, entre otros supuestos.
Al amparo del marco fijado por el Convenio Marco suscrito por ambas Instituciones, se ha creado este grupo de trabajo de carácter técnico y científico que pondrá a la venta a bajo coste unos dispositivos diseñados y validados para detectar y solucionar problemas de discapacidad. "Nuestro sueño es que el diseño tecnológico llegue al mercado".
El profesor Jerónimo González recordó que este es uno de los principales problemas de nuestro país. "Cada cuatro minutos se produce en España un ictus y es la primera causa de mortandad en mujeres y la seugnda en hombres".
Por la Universidad de Burgos será responsable Jerónimo Javier González Bernal y por el Instituto Tecnológico de Castilla y León el Grupo de Investigación en Inteligencia Artificial y Electrónica Aplicada (IAEA)
El rector subrayó que la tecnología que se desarrollará tiene un "encaje perfecto" en el Campus de Excelencia Internacional, especialmente en la línea de envejecimiento.